Llevamos 17 años recorriendo las mejores mesas y barras de Barcelona, explicando con críticas y crónicas cómo y qué se come en Barcelona. Por eso nos hace mucha ilusión poner en valor y reconocer todos los bares y restaurantes que nos han dado días y noches de gloria, ya sean de nuevas tendencias y apertura reciente, ya sean establecimientos de toda la vida que han hecho el milagro de acogernos con una regularidad y un cariño que ni en casa. Ellos son los que trabajan cuando tú te lo pasas bien, y merecen que te arrodilles, les beses los pies y les digas 'gracias' de todo corazón. Os damos la bienvenida a los premios Food & Drink de Time Out Barcelona.
Premis i nominats
The Bar World of Tomorrow
Mejor menú de mediodía
La Forquilla
Mejor proyecto sostenible
Fronda Pasaje
Mejor bar o restaurante de mercado
Bar Mercat de la Marina
Mejor establecimiento de street food
Choripa
Mejor cóctel
Adonis (Cobbler)
Mejor bar
Moebius
Mejor plato
Mollejas con cocochas (Lluritu 3)
Chef revelación
Joan Vallès (Gegant)
Mejor restaurante
Margarit
Premio a la tradición
Bar Bodega Bartolí
Guanyadors
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Los ganadores son:
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mejor plato
Ens els hem guanyat
MEJOR menú de MEDIODA
cat
es
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Mejor bar de mercado
MEJOR proYECTO sostenible
Ganadores
Mejor ESTABLECIMIENTO DE street food
chef revelación
MENCIÓN ESPECIAL A LA TRADICIÓN
tradición
mejor cóctel
El mejor restaurante del año ofrece experiencias que recordamos con un suspiro y una sonrisa, aquellas en las que una comida excelente fue el catalizador de todas las buenas vibraciones del momento. Pero también es un conjunto de virtudes y formas de hacer que van más allá de la excelencia en la cocina y las combinaciones geniales de sabores. Es un trato que se ajusta a tu personalidad como un guante, es aquel camarero que siempre sabe hacer la sugerencia correcta, es aquel jefe de sala que sabe encontrar el punto justo entre la cordialidad y la eficiencia sin ser pelota ni distante.
La Palma de Bellafila
Los restaurantes como La Palma de Bellafila son necesarios: un comercio de proximidad en el Gótico, pensado para locales y de empresarios locales. Por supuesto, esta identidad sería una anécdota si no fuera porque en él se practica una cocina espléndida: una versión original y estilizada de la cocina catalana que pone énfasis en los platos de Barcelona y en el mar y montaña.
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93 Rue Julien Lacroix
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Paloma
Stefano Balis (griego) y Jordi Fenoll (de Elche) lideran los fogones de este restaurante del Poble-sec con alma helénica que explora toda la riqueza del Mediterráneo. Sus platos, llenos de personalidad, creatividad y técnica, se maridan con exquisitos vinos naturales, también griegos. Sin duda, una de las sorpresas del año en la escena restauradora local.
Gerard Bellver, barcelonés establecido en México desde los 12 años, fue clave en el Biko, icono gastronómico latinoamericano. A finales de 2023 abrió Jiribilla en Barcelona, evitando tacos y apostando por platos mexicanos menos conocidos. La carta incluye guisos como unas lentejas de recado marino espectaculares, lengua al mole y unos postres delicadísimos.
Jiribilla
premiOs food & drink
Todas las nominaciones:
delicadíssimes
Hay veces que el recuerdo de un plato brillante copa todo el recuerdo de la experiencia en el restaurante. Japón tiene estrellas Michelin de grandes artesanos que han dedicado toda su carrera a sublimar un único plato: un estilo de sushi, unas brochetas, el rebozado más delicado... Sea un plato tradicional o creativo, el premio al Mejor Plato reconoce todo el esfuerzo y el talento que se puede verter en una receta, tanto en una creación original o llevando al extremo la artesanía más perfeccionista.
Tartar de tomate con hojas de capchina y kizami wasabi
Tomàs Abellan ya se ha sacado de la manga algunos platos icónicos, y esta delicia es buen ejemplo: la catalanización y veganización del steak tartar, un clásico francés que en los últimos años ha actuado como especie invasora. Esta versión lleva tomate de km 0, alcaparras y aceite de oliva, y gana intensidad picante cuando se envuelve en hoja de capuchina con un toque de wasabi.
El chef puertorriqueño Michael Pérez ha convertido uno de los platos más humildes de su país en una delicia irresistiblemente sexy. Más cercano a un tartar que a un guiso, lo elabora con onglet de ternera de Lleida y mantequilla tostada infusionada con cebollino, y lo sirve dentro de un cucurucho de plátano frito.
Bistec encebollado
Mollejas con cocochas
PARIS 2023
premios food & drink
Casa Luz
El Forat de Michael Pérez
Lluritu 3
Después de arrasar con los dos primeros Lluritus, el grupo de restauración de marisquerías informales ha dado un paso adelante y ha abierto un tercer Lluritu, un restaurante donde, además de brasa y plancha, hay una cocina de chup-chup y arroces magistrales. El mejor ejemplo: estas mollejas de ternera y cocochas de bacalao, un placer meloso que Santi Santamaria firmaría sin pensárselo.
En Tomàs Abellan ja s'ha tret de la màniga alguns plats icònics, i aquesta delícia n'és un gran exemple: la catalanització i veganització del bistec tàrtar, un plat clàssic francès que en els darrers anys ha exercit d'espècie invasiva. La seva versió porta tomàquet de km 0, tàperes i oli d'oliva, i agafa embranzida picant quan s'embolica amb fulla de caputxina i un petit toc de wasabi.
En un mundo tan competitivo como la restauración de Barcelona, cada año hay un puñado de nombres que destacan en la escena. Pueden ser cocineras y cocineros con pocos años de trayectoria y mucha osadía, pero también veteranos ilustres que han logrado llegar a primera división después de décadas de trabajo. Estamos hablando de gente que en un momento dado ha sabido imprimir su personalidad a un proyecto culinario que sobresale por encima del resto. Hay muchos chefs haciendo bien las cosas, pero pocos las hacen bien y a su manera.
Beatrice Casella e Iván García
Esta pareja italo-catalana ha conseguido que el Glug sea uno de los bares gastronómicos más solicitados de Barcelona. La receta no es otra que una cocina imaginativa donde confluyen las influencias del norte de Italia (Casella) y la catalana (Garcia).
No llega ni a los 30 años, pero Joan Vallès sabe lo que hace: con poco más de 20, este chef era jefe de cocina de Fermí Puig, y se ganó una reputación como maestro poco ortodoxo del guiso en Monocrom y Alkostat. Ya tiene casa propia: en Gegant sigue las palabras del maestro Puig: "Si vas a hacer platos que la gente cocina en casa, los tienes que hacer muy bien".
Joan Vallès
Sara Lemos, la dueña y chef de este restaurante brasileño de Poblenou especializado en la gastronomía del estado de Bahía, personifica una forma de entender la cocina que va más allá de los ingredientes y la técnica; rescata recetas afrobrasileñas tradicionales para recordarnos que lo que comemos también es identidad, cultura y, sobre todo, orgullo.
Sara Lemos
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Fournisseurs
Glug
Gegant
Buriti
Cuando alguien dice que hace cocina de mercado... ¿Significa que el resto hacen cocina de supermercado? Bromas aparte, no todo lo que compras en un mercado de Barcelona es km 0, pero que un restaurante se ubique y se consolide dentro de estos es toda una garantía. Porque sobre todo van a comer los paradistas y los proveedores, y no hay nadie que conozca mejor el producto que ellos. Nuestros nominados ofrecen cocina desnuda y directa y hecha con el mejor producto que tienen a mano, y eso es decir mucho.
Barra del Perelló
El clan Perelló se dedica al bacalao desde 1898. Comenzaron con una tienda en el Eixample, de allí dieron el salto al mercado ambulante del Porvenir, que con el tiempo se transformó en el Ninot, y hace una década habilitaron parte del puesto como espacio de degustación: la Barra Perelló. Desayunos, bocadillos, aperitivos y platos contundentes. Todo de lagrimita.
El Mercat de la Marina (inaugurado en 2003) tiene uno de esos lugares que deberían estar blindados por ley: un bar de precios contenidos donde el trato y la comida se cuidan al detalle. Si alguna vez os invade la nostalgia de una Barcelona de otros tiempos, acercaos a su impoluta barra y pedid alguno de los bocadillos de tortilla que preparan al momento: de alcachofas, berenjenas, champiñones... Si eso no os alegra el día, no sabemos qué lo hará.
Bar Mercat de la Marina Marina
El traslado del Pinotxo de la Boqueria a Sant Antoni ha sido modélico: con un poco menos de presión turística, Jordi Asín, sobrino de Juanito Bayén, desarrolla su labor de cazuela, plancha y guisos de alta gama –a precios razonables– para una clientela que sobre todo incluye a vecinos, encantados de sentarse en la barra sin tener que hacer ni colas ni codos.
Bar Pinotxo
Mercat del Ninot
Mercat de Sant Antoni
Mercat de la Marina
Ofrecen un menú de mediodía que combina de manera impecable la tradición catalana con cocinas del mundo –por ejemplo, encontraréis una cola de buey compartiendo cartel con unos tacos de birria– y toques asiáticos (¡qué buenos los boquerones rebozados con kimchi!). La alegría catalana –como un capipota con sepia– siempre tiene una contrapartida viajada y todo se hace desde cero, por 17 euros.
Cuanto más te alejas del centro, más te das cuenta de cómo se pierden ciertas cosas. Como el menú de mediodía popular bien hecho. El Rincón Sevillano del Carmel es un espacio transversal –se escucha a gente hablar de fútbol, arte y arquitectura– y por 13,90 euros se disfruta de un festín de platos de cuchara, de horno y postres caseros: ¡qué lentejas, qué carrilleras!
El Rincón Sevillano
Pablo Ortega, exjefe de cocina del mítico (y ya desaparecido) Tanta de Gastón Acurio, lidera este restaurante de Sant Antoni. Un homenaje a las tradicionales casas de comida del Perú, con un ambiente relajado y un generoso menú semanal de primer, segundo y postre por 16,90 euros que siempre incluye grandes clásicos de la gastronomía del país. Imperdible.
Pueblo Libre Taberna Peruana
premis food & drink
El menú de mediodía es el perfume (o la personalidad) de un buen restaurante: en las distancias cortas es donde se la juega. Si el menú de mediodía te satisface, seguro que hay muchas posibilidades de que la carta te complazca. Tener un buen menú es un ejercicio de inteligencia, economía –porque el margen de beneficio es escaso– y generosidad (porque miramos cada céntimo en nuestro gasto diario, y a casa de los agarrados no solemos volver). Un buen menú es un círculo virtuoso que cada día cuesta más cerrar, pero los de nuestros nominados son extraordinarios.
Ah, los bares... ¿Qué podemos decir de los bares? Que sin ellos no existiría la raza humana. Son la segunda casa fuera de casa, un lugar donde caer muertos y dejarnos mimar por un trato humano y una buena copa, un café, una tapita... Los bares son el tejido social que aguantan nuestra sociedad y recordemos que somos el país con mas bares del mundo. Esto hace que elegir el mejor bar sea una tarea hercúlea, pero nuestros cuatro nominados sobresalen en su especialidad: darnos de beber muy bien y tratarnos como personas (que no es poco).
Mejor Bar
Estamos en un bar de noche puro que rinde homenaje a la ciencia ficción, con un interiorismo inolvidable y casero: te contemplan ojos de neón y ves las cosas en 3D. Esto no lo han hecho con un gran despacho de arquitectura, sino con mucha alma y ganas de arraigar al barrio en lugar de gentrificarlo. Aquí se suelen hacer exposiciones de arte arriesgadas y espectáculos en vivo de pequeño formato.
Los chefs Francesc Beltri y Nicolás de la Vega del restaurante con estrella Michelin Slow & Low revisitan el recetario catalán y español con un acertado toque neo-tradicional. Desayunos de tenedor, tapas, platitos, generosos andaluces, vinos nacionales y licores imprescindibles. Local pequeño, barra larga, tocadiscos, vinilos y terraza. La felicidad.
Bar Canyí
Hay lugares que, si el mundo fuera justo, recibirían una subvención pública por el trabajo social que hacen. El Fàbula del Putxet es uno de esos. Santiago Macías y Vanesa Zorzoli, propietarios de La Brillantina, junto con Pedro Colombatti, dirigen este bar de barrio donde despachan buen ambiente, bocadillos y tapas épicas a cualquier hora del día.
Bar Fàbula
El paraguas del 'street food', es decir, la comida callejera, cobija propuestas que van desde los carritos de 'hot-dogs' de Nueva York hasta el rojo intenso de los mercados de Saigón. El 'street-food', sea de donde sea, tiene su mejor versión en restaurantes que preparan platos que se comen muy rápido y se cocinan con un proceso muy lento. Y donde tras un simple bocadillo hay una veneración por los procesos que te han puesto en tus manos.
Focacceria Balmesina
La Balmesina, nuestra pizzería favorita de Barcelona, ha abierto una focaccería donde el pan, alveolado por dentro y crujiente por fuera, está hecho con su maestría de masa italiana. El local es de lo más austero, aquí el lujo está en el producto: todo directo de pequeños productores italianos y locales (el cerdo de la porchetta es de Cal Rovira). ¿Son buenas? Son deliciosas.
En Gràcia, Pablo Lagrange (exNoma, Mugaritz, Tickets), Lucía Aguilar (exEnigma, GoXo) y Ricardo Mateo dirigen este pequeño local dedicado al choripán, el emblemático bocadillo sudamericano de chorizo criollo y chimichurri. Lo elaboran todo desde cero: pan, carne, salsas e incluso el refresco de cola. Más que comida rápida, es artesanía, rigor y técnica.
En la plaza Letamendi hay un templo del kebab donde la calidad se nota en cada bocado: pan artesano, carne adobada con especias, brasa de haya y salsas caseras irresistibles. En la carta, tres opciones fijas y un kebab del mes, en döner, dürum, bocadillo o bol. Probad el Berlín 1972, el catalán o el tandoori y preparaos para una explosión de sabor.
Kay Kebab
Se queda corto decir y simple decir que los restaurantes sostenibles son el futuro de la restauración: ¡la sostenibilidad es el futuro del planeta! Ya hace años que no eres lo que comes: sobre todo eres lo que ha comido lo que comes y también eres cómo te llega a la mesa lo que comes. En un sector con un margen de beneficio cada vez más escaso como la restauración –y de los más afectados por la crisis de la inflación– es necesario premiar los proyectos que hacen el esfuerzo de aplicar el reaprovechamiento, la proximidad y el residuo cero a suyo día a día. Además, piensa que en un restaurante sostenible se comerá bien siempre: conocen y tratan el producto como nadie.
El biólogo y chef argentino Máximo Cabrera es el responsable de este nuevo restaurante de alta cocina plant-based en el Born. Con un profundo conocimiento, crea platos saludables, creativos y sostenibles. En pocos meses, se ha convertido en un referente gastronómico que defiende una alimentación botánica justa para las personas y el planeta.
El compromiso del Suru Bar con la sostenibilidad no pasa solo por preparar platos deliciosos con técnicas de alta cocina, donde los menudos y el aprovechamiento juegan un papel importante: han eliminado por completo los plásticos de un solo uso, en lugar de comprar vajilla nueva reparan la rota, y también están estudiando fabricar sus propios platos y servilletas.
Suru Bar
Este bar moderno y gastronómico sigue tan al pie de la letra las normas de la temporalidad y la proximidad que cambian la carta casi cada dos días, literalmente. Se abastecen preferentemente de vegetales del Baix Llobregat, y la proteína animal es un complemento. Además de la proximidad, privilegian el aprovechamiento al máximo: probad sus buenísimos buñuelos de recortes de hierbas.
Vereda Bar
Pour en savoir plus
La creatividad no pasa por el efectismo, sino por la originalidad. Y de eso hay mucho en el Bestiari de Luca Corradini, una coctelería donde todo es artesanal –desde los vasos hasta muchos licores–. El Estarrufadet, una mezcla de limoncello casero, mermelada de frambuesas, limón, boldo –hierba silvestre medicinal–, naranja y esencia de pino, transmite una fiesta mayor.
Estarrufadet
Es una gran noticia cuando un virtuoso opta por el clasicismo: este es el camino de la coctelería Cobbler de Edir Malpartida y Antonio Naranjo, dos de los mejores bartenders que te puedes encontrar en Barcelona (y en el mundo). Sus tragos son un homenaje y un reconocimiento a los cócteles de toda la vida, y del Adonis –mezcla de jerez fino, vermut y bitter– nos tomaríamos tres al día.
Adonis
Hay cócteles que son ligeros, agradables y frescos como los lugares en los que se sirven. Es el caso del Libra Smash, más que un combinado, un reflejo del alma del Libra, un pequeño local de Sant Antoni que, de manera informal, quiere reunir algunas de las delicias de Italia y Cataluña. Hecho con vermut blanco, ginebra y albahaca, es un trago del estilo de vida mediterráneo.
Libra Smash
Somos la capital mundial del trago fino, nuestros establecimientos ocupan los primeros puestos de los rankings internacionales, y en Barcelona se ha desarrollado un ecosistema de coctelerías donde 'bartenders' virtuosos redefine qué es ir a tomar una copa. Y a la vez, somos la ciudad por la que entró la coctelería en España y tenemos barras venerables que bordan clásicos llenos de alma. Y también nos encantan los locales que optan por una tercera vía: la creatividad quizás no tan espectacular, pero con combinaciones memorables. Cualquiera de estos tres podría ser el mejor cóctel de la ciudad.
Nominés des Food and Drink Awards
Millor còctel
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Quid du jury ?
Le prix du Meilleur Bar Responsable par The Bar World of Tomorrow est désigné par un jury de professionnels, membres de la Sustainable Restaurant Association. Sélectionnés avec soin par la rédaction de Time Out Paris, les 4 mixologues nominés, se sont vu remettre une grille d’évaluation, permettant au jury d’en savoir plus sur le rôle et l’implication de chacun tant sur le plan environnemental que sociétal, en s’attardant plus précisément sur le sourcing de leurs ingrédients, la gestion des déchets et de l’énergie, mais aussi l’aspect diversité, inclusion et bien être au travail.
Au croisement entre l'hôtellerie et une alimentation plus durable, la Sustainable Restaurant Association (SRA) définit et certifie la durabilité des services de restauration grâce à son cadre holistique en 10 points et le Food Made Good Standard, une référence mondiale en matière d'évaluation et de contrôle de la durabilité dans le secteur de la restauration.
Ces dernières années, l’industrie a été confrontée à de multiples problématiques l’obligeant à interroger et adapter ses pratiques. Plus que jamais, le bar est l’objet de multiples remises en question, au niveau économique, environnemental ou social. Depuis l’interdiction, en 2021, des pailles et des touillettes en plastique dans les établissements de restauration, suivie de près par la mise au ban des terrasses chauffées, le secteur a aussi connu avec la pandémie une crise totale l’obligeant à se réinventer en profondeur. C’est dans ce contexte incertain, et donc propice à la remise en question, que The Bar World of Tomorrow s’est développé, autour de quatre piliers : les ingrédients, le service, le bar et le personnel.
Quels enjeux pour le bar de demain ?
La SRA représente la plus grande communauté mondiale de promotion de la durabilité dans l'hôtellerie. Pour savoir comment vous impliquer dans le SRA et le Food Made Good, n’hésitez pas à contacter l'adresse suivante : hello@thesra.org
Le bar de demain s’invente dès aujourd’hui ! Le prix Meilleur Bar Responsable par Bar World of Tomorrow récompense les adresses les plus vertueuses, à la fois dans le domaine humain et écologique. Quels lieux se montrent particulièrement bienveillants et inclusifs avec leurs équipes ? Responsables dans ce qui est proposé aux clients ? Concernés par les bonnes pratiques environnementales dans les recettes (respecter les saisons, limiter ou valoriser les déchets) ? Qu’on se le dise : un cocktail durable a toujours meilleur goût ! Voici quatre bars parisiens qui l’ont parfaitement compris.
Meilleur Bar responsable par The Bar World of Tomorrow
En partenariat avec Pernod Ricard pour le prix du Meilleur bar responsable
Bestiari
Cobbler
Libra Salón Convival
És una gran noticia quan un virtuós opta pel classicisme: aquest és el camí de la cocteleria Cobbler de l'Edir Malpartida i l'Antonio Naranjo, dos dels millors bartenders que us podeu trobar a Barcelona (i al món). Els seus tragos són un homenatge i un reconeixement als còctels de tota la vida, i de l'Adonis –mescla de xerès fino, vermut i bitter– ens en fotríem tres al dia.
Salón Convival
Millor projecte sostenible
En una ciudad que centrifuga las tendencias a ritmo frenético, mantenerse fiel a tu ideario (obviando las tentaciones de incorporar ceviches o tacos a la carta) es todo un reto. Esta categoría reivindica locales que desde hace décadas (o desde casi un siglo, en algún caso) han mantenido una tradición y una forma de hacer que ha marcado generaciones. Porque ya sabéis que lo importante de la tradición no es hacer siempre lo mismo, sino hacerlo sin bajar el nivel, con una excelencia que convierte a estos restaurantes en clásicos.
Menció especial a la tradició
premios food & Drink
Los años pasan, pero Ca l'Estevet no decae: este restaurante histórico da de comer desde finales del siglo XIX, y desde 1940 como Ca l'Estevet. Encontraréis al frente la quinta generación de Casa Agustí, que ha rejuvenecido un espacio donde aún se preparan los mejores canelones y escudella i carn d'olla de Barcelona. ¡Y que sea por muchos años más!
Ca l'Estevet
Historia viva de Sants desde 1939, cuando el abuelo Josep abrió una bodega para los trabajadores del barrio. Su hija Marina la convirtió en casa de comidas, y ahora los nietos Albert y Vicenç mantienen su esencia. Desayunos de cuchillo y tenedor, tapas y almuerzos de caracoles, fricandó, rovellones y callos para plantar cara a la dictadura del tataki homogeneizador.
Inaugurado en 1966, este lugar de toda la vida ha resistido manteniéndose como un referente para comer sencillo y de calidad. Con una carta escrita a mano cada día en una pizarra, ofrecen platos clásicos como gazpacho, fideuá, canelones (los fines de semana) y otras delicias que han fidelizado generaciones de clientes. Un auténtico tesoro del Eixample.
Restaurant Portolés
Història viva de Sants des de 1939, quan l’avi Josep va obrir una bodega per als treballadors del barri. La seva filla Marina la va convertir en casa de menjars, i ara els néts Albert i Vicenç en mantenen l’essència. Esmorzars de forquilla, tapes i dinars de cargols, fricandó, rovellons i callos per plantar cara a la dictadura del tataki homogeneïtzador.
Mención especial a la tradición
Inaugurat el 1966, aquest lloc de tota la vida ha resistit el pas del temps, mantenint-se com un referent per menjar senzill i de qualitat. Amb una carta escrita a mà cada dia, ofereixen plats clàssics com gaspatxo, fideuà, canelons (els caps de setmana) i altres delícies que han fidelitzat generacions de clients. Un autèntic tresor
